Descripción
Entre los verdes valles y las montañas que besan el cielo, se encuentra un rincón encantado donde la brisa acaricia suavemente tu rostro y los rayos del sol danzan entre las hojas de los árboles. En este paraíso terrenal, el tiempo parece detenerse, permitiéndote sumergirte en la serenidad de la naturaleza y descubrir la magia oculta en cada sendero sinuosamente trazado. Caminar por estos senderos es como desentrañar los secretos de un cuento de hadas, donde cada paso te lleva a descubrir nuevas maravillas. La melodía de los arroyos cristalinos acompaña tus pasos, mientras los pájaros entonan su sinfonía en los árboles frondosos que se mecen suavemente con la brisa. Aquí, entre la exuberancia de la flora y la fauna, el alma del viajero encuentra su refugio. Es un lugar donde los sueños se entrelazan con la realidad, donde los colores del atardecer pintan el cielo con tonos dorados y naranjas, y donde la paz y la armonía son el verdadero tesoro que se encuentra en cada esquina. Cada mirada, cada suspiro, se convierte en un recuerdo imperecedero que se graba en el corazón del viajero. En este santuario natural, la mente se libera de las preocupaciones del mundo exterior y se sumerge en la contemplación pura de la belleza que lo rodea. Así que déjate llevar por el llamado de la aventura y adéntrate en este paraíso escondido. Descubre la magia que aguarda en cada rincón, y permite que tu espíritu viajero se eleve con la promesa de nuevas experiencias y descubrimientos en el horizonte... . Finca Emmita está a 10 min en coche de El Perelló y a 20 min del mar, estamos en medio de un valle, sin vecinos ni caminos cercanos. Todo lo que puedes oír es el sonido del silencio. La finca es 100% autosuficiente. Funciona con energía solar, recogemos agua de lluvia y las aguas grises se reciclan para regar el huerto y las plantas. Ofrecemos también Internet de alta velocidad. El Olivita ha sido recientemente renovado y ofrece una pequeña cocina bien equipada, una sala de estar con un sofá cama y una estufa de leña, el altillo del entrepiso tiene una cama doble y se accede por escaleras. El baño tiene una gran ducha y un inodoro de compostaje. Hay una bonita terraza con mesa y sillas, tumbonas y barbacoa (no se utiliza de junio a septiembre por riesgo de incendio y se sustituye por una plancha). Los huéspedes tienen uso exclusivo de la Olivita. La piscina es compartida y está abierta de junio a septiembre. Emma, la dueña, vive en la Finca y sólo la verás si necesitas algo. Ella es muy respetuosa con la privacidad de sus huéspedes. Hay otra casita al otro extremo del terreno que suele estar ocupada por huéspedes que como usted buscan calma y tranquilidad. Contamos con 3 perros muy amigables que vendrán a saludarte todos los días y estarán encantados de acompañarte en tus paseos por la finca. Hay 3 gatos y algunas gallinas que producen huevos frescos diariamente. La finca se encuentra a 10 minutos en coche del pueblo de El Perelló, se necesita coche. Para acceder a la finca hay un camino de tierra de 5 a 7 minutos, es posible llegar con un coche normal. Emma te enviará antes de tu llegada instrucciones muy detalladas sobre cómo llegar.