Descripción
En este alojamiento se respira una auténtica sensación de tranquilidad y bienestar. Se trata de una casa de invitados independiente de 55 metros cuadrados, ubicada en una finca privada de 2000 metros cuadrados, rodeada de naturaleza y diseñada para ofrecer calma y desconexión. La casa ofrece un ambiente acogedor, perfecto para dejar atrás la rutina diaria, con un jardín de uso exclusivo que invita al descanso, la lectura o las comidas al aire libre. El alojamiento La casa de invitados cuenta con un diseño funcional y luminoso. Dispone de dos habitaciones, una cocina totalmente equipada, un baño completo y un salón-comedor cómodo y amplio que se abre al jardín privado. El mobiliario es sencillo y confortable, pensado para que los huéspedes se sientan como en casa. Tanto si viajas en familia como en pareja, el espacio ofrece todo lo necesario para una estancia agradable: ropa de cama, toallas, conexión Wi-Fi y plaza de aparcamiento dentro de la propiedad. El jardín privado es ideal para disfrutar de desayunos al sol, cenas tranquilas al atardecer o simplemente para que los niños jueguen libres en un entorno seguro y natural. El entorno La finca, rodeada de naturaleza, ofrece tranquilidad absoluta. El canto de los pájaros y la brisa entre los árboles marcan el ritmo de los días. Aquí podrás disfrutar de noches estrelladas, paseos por el campo y esa desconexión que solo ofrecen los entornos rurales auténticos. Los alrededores Su localización es perfecta para explorar Cantabria. A tan solo 5 minutos en coche encontrarás algunos de los lugares más emblemáticos de la región como Santillana del Mar, con su arquitectura medieval, o Suances, con sus conocidas playas ideales para el baño o el surf. Un poco más allá, a unos 20-30 minutos en coche, podrás visitar Santander, la capital con su elegante bahía y oferta cultural; el Parque de la Naturaleza de Cabárceno, uno de los principales atractivos turísticos del norte de España; o el encantador pueblo de Comillas, famoso por su arquitectura modernista y su ambiente marinero. La casa es un punto de partida ideal tanto para rutas de senderismo y actividades al aire libre como para visitas culturales, gastronómicas y de ocio.