Descripción
Este lugar es demasiado especial para tratarlo como una simple estancia de una noche. Una estancia de una noche no hace justicia a lo que se puede vivir aquí. Por eso, hace una docena de años, nos decidimos por esta casa única en la cima de la montaña Tarczynka, tras largos meses de vagar por toda Polonia en busca del lugar perfecto para vivir. Empezamos en el Beskid Niski, luego fuimos al este, y de ahí a la costa, y finalmente de vuelta al sur. Pero ninguno de estos lugares era tan especial como éste. Hemos creado un jardín de casi una hectárea alrededor de la antigua casona, renovada con reverencia. La terraza domina el espectáculo de las puestas de sol diarias, el antiguo granero con sus techos abovedados se ha transformado en un gran espacio para la relajación y la conversación. Aquí hay espacio, no sólo físico, sino también para las buenas emociones. Cada día aquí puede servir como un pequeño ritual: desayunos matutinos a la sombra de la pérgola, un paseo por uno de los pueblos más pequeños de los Sudetes Occidentales, donde los edificios son antiguos y datan de hace al menos 100 años, a lo largo de un hermoso barranco llamado Valle de los Búhos, y luego momentos de reflexión sobre la belleza de las campanas del prado, que atraen la mirada y el corazón, aunque no tengan ningún propósito en particular. Simplemente son. Y eso es suficiente.