Platraver

Ha estat una experiència perfecta. Els amfitrions han estat un encant i molt atents a tot. La cabanya estava molt neta i en bones condicions, tot funcionava bé i està tot molt ben explicat. La comunicació és clau, i ens hem sentit molt ben acollits. L'entorn és un privilegi i ens ha fet temps de tot, una mica de pluja, núvols i molt de sol. Tenen cavalls lliures i molt simpàtics que hem pogut acompanyar en les diverses rutes que es poden fer per allà. Aviso, hi ha molt poca cobertura així que si teniu pensat veure pel·lícules o alguna sèrie, descarregueu-les o, com hem fet nosaltres, desconnecteu de la tecnologia i gaudiu de l'entorn i la companyia. 10/10 i ho recomanarem!! :)

La estancia en la cabaña ha sido fantástica, estuvimos mi pareja y yo un par de días y, aunque el tiempo no acompañara y estuviera lloviendo prácticamente todo el finde, nosotros disfrutamos como niños dentro de la cabaña. Es un lugar que te permite desconectar y además te puedes dar paseos por la larga finca que tienen. Hay caballos aunque nosotros no tuvimos la suerte de verlos de cerca. Los anfitriones fueron muy amables con nosotros. La única pega que le pongo (pero no es culpa suya) es el camino que hay que cruzar para llegar a la finca. Al final del viaje nos encontramos con un tramo en pendiente con varias curvas y bastante peligroso y, después, para entrar a la finca te encuentras con un caminito de piedras horrible, mejor ir muy lento porque sino adiós ruedas. Igualmente les doy un 10 porque para mi ha sido un viaje inolvidable. 😊

Un lugar mágico. Fui de escapada con mi pareja i era lo que necesitabamos, desconectar de la civilización, sin nadie que nos molestara. Recomendamos ir bien preparados con mcuhos suministros de comida. Tienen micrrondas y gas para cocinar, y si necesitais más comida, en la masía estan bien preparados, pero el supermercado más cercano esta a 40 minutos en coche por carretera de curvas y tierra. Además, la masía tiene caballos cerca en un gran terreno cerrado que se acercan controladamente. Fue precioso y nos encantaría repetir. Gracias a Mariona i Lluís, fueron muy buenos amfitriones