Ordesa y Monte Perdido alojamiento

Estupendo lugar para pasar un par de días fuera y desconectar de verdad. ¡La cúpula y las vistas son increíbles! La cúpula tiene todo lo necesario para pasar un par de noches y disfrutar de la paz

Muy bonito y buenos servicios.

¡ESPECTACULAR! La casa es una pasada para desconectar y el anfitrión muy atento y amable!! Nos vamos encantados!!! 👏👏👏

Una experiencia maravillosa , muy recomendable

Hola. Todo perfecto con la casa. Ya habíamos estado y seguro repetiremos. Es una preciosidad, por dentro y por fuera. Muchas gracias a Héctor por su amabilidad también. Un saludo

Genial, un lugar muy bonito y especial. Sé que volveremos. Gracias!

la dueña amable, el establecimiento igual que en las fotos y completamente equipado como indica en la página.

La Morada de Creta es una casa increíble y preciosa, rodeada de naturaleza, paz y tranquilidad. Mi pareja y yo estuvimos muy a gusto con nuestros dos perros, que al final fueron los que más disfrutaron. Además, la localización es ideal si tienes pensado hacer rutas de montaña. ¡Y el propietario fue muy atento y se aseguró en todo momento de que estuviéramos bien!

Casa con encanto , equipada con todo lo necesario. Moderna y acogedora, con juguetes y libros para niños. Una estancia mágica rodeados de montañas y un alojamiento que nos hizo sentir mejor que en casa.

Es un lugar importante, ideal para desconectar 100% recomendable. Gracias por existir

Lugar encantador, las fotos reflejan perfectamente la realidad, y el anfitrión Ismael es muy amable y disponible. Fue un fin de semana de inmersión en la naturaleza, relax, tranquilidad, paz, perfecto para poder desconectar de la ciudad y de la rutina! Seguramente volveremos a ir, gracias Ismael por todo, recomendado 100%

Una estancia maravillosa. La casa es muy acogedora, con todo lo necesario para sentirse a gusto desde el primer momento. Está rodeada de un entorno precioso, lleno de calma y naturaleza, ideal para desconectar y recargar energías. El ambiente transmite paz y autenticidad, y cada rincón invita a relajarse y disfrutar sin prisas. Además, la limpieza y el cuidado de los detalles hacen que uno se sienta como en casa. El anfitrión fue muy atento y cercano, siempre disponible para cualquier cosa, lo que hizo que la experiencia fuera aún más especial. En definitiva, un lugar que recomiendo al 100 % para quienes buscan tranquilidad, comodidad y una conexión real con la naturaleza.